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Testimonio de una ex-operaria del amor

Hay testimonios dramáticos de personas que pertenecieron a la secta y que hoy, por fin, se sienten libres y están nuevamente reconstruyendo sus vidas después de haber sufrido la manipulación mental ejercida por Mercedes Miranda, que no sólo les significó pertenecer a las filas, sino perder todo su patrimonio.

Queremos relatar el testimonio de una ex operaria del amor, que ha querido proteger su identidad debido a lo doloroso que fue su experiencia en la cadena del amor, por lo que se ha decidido cambiar su nombre:

Dramático es el caso de Mireya:

Conoció la Cadena del Amor en una charla informativa el año 1996. Pasaba un período de crisis bastante grave. Recién había quedado viuda y quedaba a cargo de sus dos hijas adolescentes. Afortunadamente, tenía un buen trabajo que le permitía salir adelante, educar a sus hijas y mantener el hogar. Pronto se interesó en ayudar en difundir la Cadena del Amor y decide ese mismo año, hacer el "Curso de Operarios del Amor", dictado por Mercedes Miranda.

Una vez hecho el curso, Mercedes le pide ingresar a la "Fuerzas de Ventas" para que comience a entrenarse en la venta de libros, que según la profeta, es el único medio que contiene la salvación de la humanidad.

Dejó su trabajo convencida y presionada por Mercedes Miranda de lo mucho que ganaría vendiendo libros. Mercedes le indicó todas las pautas a seguir para que fuera despedida: llegar tarde a su trabajo, salir a vender libros, no responsabilizarse por su trabajo, así podría obtener un desahucio legal. Por otro lado, Mercedes le indicaba que si no trabajaba para la humanidad, podría perder a sus hijas.

Una vez despedida, va donde la "profeta" a mostrarle su finiquito de trabajo, con lo que Mercedes Miranda aprovecha de pedirle la cantidad de $ 2.000.000.- (US$ 4.000.-) a cuenta de nada.

Ahora sin trabajo, y con dos hijas a quienes mantener, debe comenzar a vender libros. Por medio de una línea de crédito en el banco, tuvo que comprarle a Mercedes Miranda $500.000.- (US$ 1.000.-) en libros, pues ya no tenía dinero para efectuar la compra y tampoco la profeta se daba por aludida por la fuerte suma de dinero solicitada anteriormente.

Comienza a vender y se da cuenta que vender libros no le permite subsistir económicamente. Decide buscar un trabajo a medio tiempo en otra empresa para poder mantener su hogar. Mercedes Miranda rápidamente es informada de que Mireya ya no trabaja full time vendiendo libros, y logra ubicarla telefónicamente para increparla duramente por estar trabajando para "el mundo negativo".

Mireya, que está atemorizada, deja nuevamente su nuevo trabajo, y pronto queda sin ningún recurso económico, al extremo de pasar hambre... comienza a vivir de la ayuda de sus vecinos. Pronto llega a la destrucción total, enfermándose gravemente y sin recursos para ir a un médico. Esto la hace tocar fondo y tomar consciencia de que se encuentra en una secta destructiva, en la que le han hecho perder todos sus recursos económicos y además debe trabajar como esclava vendiendo libros por el resto de sus días.

Mireya se retiró de la secta, ahora está trabajando y poco a poco está logrando recuperar el control de su vida. No quiere saber nunca más nada de esta horrible pesadilla. Sus hijas están felices de haber recuperado por fin a su mamá.

Otros ex operarios del amor tuvieron la oportunidad de estar junto a Mireya en estos difíciles momentos, pudiendo constatar todo lo que Mercedes Miranda perjudicó a esta mujer que entregó lo más noble en pro de una causa que ella creía verdadera. También fue uno de los motivos por el cual muchos operarios del amor se retiraron de la secta.

Santiago, 15 de Enero del 2000

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